Libra

Libra es el reino al que los hombres se han visto reducidos. En un inicio, el ser humano dominaba casi todo el territorio de Lathenia, quedando las demás razas a su merced o recluídas en las Tierras Libres. Sin embargo, y a causa de la Gran Guerra, hombres, hombres lobo y enanos coexisten en Libra de forma pacífica.

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Todas las razas que habitan en el reino independiente son odiadas por los elfos en general: los primeros son aquellos ante los que los elfos oscuros consideran que han sido sometidos durante décadas, y los últimos son considerados la causa de la división de la raza élfica, ya que la Avaricia se presentó con forma de enano a llevarles las uvas del odio. Y ni qué decir tiene que los hombres lobo son entendidos como una aberración de la naturaleza.

El reino neutro es el más complejo de los tres debido a que aunque sus integrantes se mantienen al margen de las disputas que se producen entre los elfos, una decisión suya puede ser determinante. Muchos de sus habitantes se sienten marginados, y otros tantos, ansían recuperar el poder de Lathenia, poder que les ha sido arrebatado por los elfos.

La región fue siempre dirigida por amigos, compañeros y consejeros de Septimus el Inmortal, quien guiaba al reino desde las sombras; y ante quien nadie se rebeló por ser una persona querida, pues había llevado al continente la firma de la paz de la Gran Guerra contrayendo matrimonio con Faunalyn la Oscura, la hasta hace poco, dueña junto a Edwyrd III, de Noctem.

Septimus el Inmortal nunca quiso el trono por estar ligado al reino de Noctem, algo que podía resultar peligroso para Libra. Sin embargo, a día de hoy, es Valrak quien manda, pues tomó el mando cuando tuvo la mayoría de edad. La última vez que Septimus hizo acto de presencia fue en la ascensión a rey de su hijo. Desde entonces, se encuentra en paradero desconocido, e incluso, se le da por muerto.

La región de Libra abarca dos grandes ciudades, Antràchas y Vrâchos, además de cinco aldeas: Fluvia, Pluvia, Parva, Calx y Unde. Los prados, minas y campos de cultivo predominan en las tierras, generando una gran riqueza. De este modo, las principales ganancias de Libra provienen de la minería, la agricultura, la ganadería, la pesca y los inventos.

La mayoría de la población se encuentra aún sumida en las consecuencias de la guerra, y el porcentaje más adinerado de la gente se halla concentrado en la raza enana, pues las minas de Gaerl son propiedad suya. Deben el nombre a Gaerl, el enano que las descubrió hace más de 700 años.

Ciudad de Vrâchos

Caballero vigilante

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