Raza: Pecado capital.
Forma mortal: Humano.
Familia: No le queda nadie vivo.
Lugar donde vive: Nómada.
Edad y fecha de nacimiento: Tiene 512 años, aunque aparenta algo más de una treintena humana. 2 de mayo.
Uso de armas: Se maneja con cualquier tipo de arma de forma excelente.
Fortalezas: Su tenacidad, gran fuerza de voluntad y capacidad de superación en situaciones extremas.
Debilidades: A parte de no saber dominar la propia ira, su temeridad y las mujeres de buen ver le pierden.
Rasgos psicológicos: Es terco, impaciente, agresivo, violento y dominante. Tiene además un fuerte sentido del honor.
Estatus social: Soltero.
Avatar: Jason Momoa.
Cuenta de Twitter: @ira_ardan
Biografía: Ardan pasó gran parte de su vida como humano luchando en batalla prácticamente por todo el continente, llegando a conseguir el rango de capitán de unas de las mayores guarniciones de Libra.
Además de su vida como guerrero, se enamoró perdidamente de Ilona, una aldeana que conoció en una de las tantas villas sitiadas por el ejército, y formó con ella una familia engendrando a Sorin.
Durante años vivió feliz, haciendo lo que más le gustaba: ganar batallas y pasar el resto del tiempo con su esposa e hijo. Todo cambió, para su desgracia, nueve años después del nacimiento de Sorin.
Ardan se encontraba en medio de una guerra cuando varios oficiales de más alto rango cometieron un error fatal de estrategia, desoyendo los consejos de Ardan y tantos otros que le apoyaban, sabiendo que estaban tomando una mala decisión al decidir atacar al enemigo en una muy mala formación siendo superados, por bastante, en número.
Las tropas fueron por lo tanto acorraladas en el terreno y atacadas por ambos flancos sin escapatoria posible. El intento de reorganizarse y elegir una formación defensiva nueva apenas sirvió para poder escapar con vida a una cuarta parte del ejército.
La guarnición de Ardan quedó prácticamente diezmada y para colmo los altos mandos le echaron a él las culpas, como si hubiese sido todo idea suya cuando justamente fue al contrario. Ardan quedó degradado de su puesto con la deshonra que eso conllevaba, y su orgullo quedó herido como nunca antes.
El rumor de la derrota y su nombre se propagaron por el campamento y las aldeas cercanas como el fuego, y a cada día que pasaba le costaba más contener la furia que sentía dentro.
Fue entonces cuando la antigua Ira se enteró de los hechos, puesto que estaba en una de las villas cercanas al campamento, y no desaprovechó la oportunidad de acercarse a Ardan y quebrar su voluntad, anegando todo su ser y su alma en una cólera jamás vista.
Ardan esperó a la noche para poner en práctica su plan, prendiendo fuego a todas las barracas que selló a cal y canto, así como a las tiendas que conformaban el campamento. Tenía tal rabia dentro, mucha a más a causa de la influencia de la antigua Ira, que no quedó nadie más vivo a parte de él, habiendo dado muerte incluso al portador del pecado capital que le había dado aliento aquella noche.
Tras esto, y convertido en la nueva Ira de Lathenia, vagó sin rumbo por todo el continente, abandonando a su familia, que terminó por perecer con el paso de los años, por la vergüenza y la deshonra que aún teñía su nombre. Desde entonces se le empezó a conocer como el Señor de la Guerra.